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Los padres que experimentan estos cambios por primera vez no deben asustarse ya que son alteraciones que nos demuestran que el niño se está desarrollando y creciendo bien. Siempre debemos mantener la calma hasta los límites que nos sean posibles y al mismo tiempo fomentar la alegría y el autodontro. ¡Tarea difícil donde las haya!
El mal humor infantil puede tener muchas causas: frustracciones, problemas de salud,... Según los psicólogos es muy difícil crecer, porque la etapa del desarrollo de la personalidad y la conquista de espacios de independencia son etapas difíciles de conseguir.
En primer lugar a los 2 años ya se empieza a manifestar rebeldía a través de rabietas ante el "no" impuesto por sus padres.
De 5 a 7 años se le suele llamar "Mudanza de comportamiento" o "Adolescencia de la primera infancia", porque existen alteraciones físicas, psíquicas y sociales típicas del crecimiento.
A partir de los 8 o 9 años de edad la rebeldía vuelve día a día en los niños. A esta edad, los niños esperan respuestas y que todos sus deseos sean atendidos enseguida. Esta postura suele durar hasta el final de la pubertad.
¿Cómo llevar la situación?
Las palabras clave son: " CALMA , PACIENCIA, AUTOCONTROL" para poder educarlos y comprenderls lo mejor posible.
Los padres deben utilizar los momentos de mal humor de sus hijos y aprovecharlos enseñándoles a encontrar opciones y soluciones ante resolución de conflictos, superar y darles algunos consejos ayudados con la empatía a superar frustraciones, a controlar y conocer sus emociones, etc.. y demostrarle siempre que él no es el único que está pasando por esto que hasta nosotros sus padres lo hemos pasado.
También sé que de la teoría a la práctica puede ir un mundo, pero para mí no me sirve de excusa no poner remedio, porque hay muchas fuentes de información que te pueden orientar y ayudar a cómo tratar y llevar a tu hijo.
¡Ah! y por experiencia propia nunca mirar hacia otro lado para evadirse o decir que no le pasa nada a tu hijo.
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